Lo que mi perro ha escuchado este mes XXV

Hoy toca una de mezcladitos musicales para que solo tengáis acercar el oído, cerrar los ojos, y disfrutar del variopinto paisaje sonoro que os hemos preparado. Quién iba a decir a Liquid Tension Experiment, Ann Peebles, The Devils, The Chats y Red Fang, que iban a coincidir en algún punto del ciber espacio. Esto es único. No lo contéis por ahí. ¿Sentís el cosquilleo? Pues allá vamos.

Red Fang por Tim Tronckoe

Liquid Tension Experiment. Entre las cosas positivas de los confinamientos, encerrar sin nada que hacer (ni dónde girar) a cuatro monstruos del metal progresivo tiene su aquel. Por ejemplo, la vuelta de una de las formaciones más esperadas del gremio de los "freakies instrumentales": Liquid Tension Experiment; es decir, el gran Jordan Rudess, el gran Mike Portnoy, el gran John Petrucci y el gran Tony Levin, en versión instrumental. Sueño húmedo de informáticos y demás criaturas de fondo de habitación, que llevaban la friolera de 22 años esperando la continuación de aquellas dos gemas que supusieron los volúmenes 1 y 2, editados por la discográfica Magna Carta en 1998 y 1999, que vienen a ampliar el catálogo de los Acid rain, Universal mind y demás desparrames musicales.

Ann Peebles. En algún sitio he podido leer que si Aretha Franklin no hubiese existido, Ann Peebles sería la reina del soul. Sólo unos años más joven que Aretha, Ann Peebles fichó por Hi Records, prácticamente cuando la primera grababa los que fueron sus discos esenciales. La llegada de la ola funky apenas dio tiempo a que Peebles demostrase su valía antes de la llegada de la fiebre disco en los años setenta. Pero por suerte, aquella elegancia y cautivadora voz quedó retratada en discos como este Part Time Love (Hi Records, 1970) que recoge bombazos como la impresionante I still love you o Make me yours, y que la encaraman como una de las joyas del catálogo de Hi Records junto a gente como Syl Johnson o Al Green. Canela en rama.

The Chats. Desde algún despacho de prensa salió la curiosa idea de homenajear el 30 aniversario de la publicación del Black Album de Metallica, reuniendo versiones de artistas que se saliesen de lo esperable. Sonaba original...pero, dejando atrás las doscientas versiones de Nothing else matters, de las que únicamente los Morning Jacket se atreven con un lavado de ritmo, el experimento no ha salido todo lo satisfactorio que se pudiese esperar. No obstante, hay perlitas. Entre ellas St. Vincent, Kamashi Washington, Idles o el equipo de Holier than thou con OFF! y Chats a la cabeza. Esto últimos, australianos nacidos de la unión incestuosa del punk y el garage, se han cascado la versión punkarrilla y chispeante del tercer corte de lo que fue el salto a la fama de Metallica.

The Devils. Desde Nápoles con amor...sexo, pecado y R'n'R (¡Toma pareado!). El hecho de que el nombre del combo proceda de la película de 1971 The Devils, inspiraba en uno de los casos de embrujamiento colectivo más conocido de la historia según el cual un grupo de monjas ursulinas fueron "hechizadas" por el padre Urbain Grandier, invita a envolver de cierta maldad las intenciones de esta diabólico dúo compuesto por el predicador Gianni Pregadio a la guitarra y voces, y la monja Erica Toraldo en batería voces. Después de dos largos producidos por Jim Diamond, conocido por trabajar con gente como The Dirtbombs o The White Stripes, la pareja continua exhumando el espíritu de los Cramps y paseándose por el lado más oscuro del blues garajero con este Beast Must Regret Nothing (Goodfellas, 2020) que cuenta esta vez con la dirección musical del amigo de todos Alain Johannes, y la ilustre colaboración de Mark Lanegan.

Red Fang. Pero para amigos de todos, nuestros queridísimos Red Fang están de vuelta con un nuevo álbum de estudio. Arrows (Relapse Records, 2021) viene a revindicar la simplicidad de su fórmula, abandonando (al menos por el momento) el San Benito que muchos les habíamos colgado de continuadores del sonido de sus contemporáneos Mastodon, y regresan a nuestras casas con aquel sonido crudo que poco a poco habían ido dejando atrás desde aquellos formidables Red Fang (Sargent House, 2009) o Murdered in Mountains (Relapse Records, 2011). El nuevo retoño tiene temacos como la misma Arrows, Dr. Owl, Funeral Coach o este Rabbits in hives que además viene acompañado de otro de esos divertidísimos vídeos marca de la casa, dirigido por Ansel Wallenfang, que nos devuelven la esperanza en la humanidad.